jueves, 17 de diciembre de 2009

Petrificados por el Amor




**Petrificadas Por El Amor**

Las primeras luces de la noche estaban encendidas, cuando la vi entrar a la iglesia,
con su hermoso vestido blanco, que representa la pureza de la virgen a casarse, no
pasó mucho rato que salió del brazo que sería su marido.

¿ Acaso él sabía que primero fue mía ?

Nos enamoramos una mañana de playa, yo casado y ella comprometida, nos tomamos
de las manos y nuestros ojos guiaron nuestras bocas, y ellas se besaron. Y nosotros,
como hechizados, caímos en la playa llenos de pasión, de urgencia y de amor.

Dejamos en la arena nuestras huellas de amor prohibido, de amor sin futuro, de amor
sin verguenza, de amor enloquecido.

Después vino el a dios, de sus ojos las lágrimas, corrían por sus mejillas, mi cuerpo
temblaba, al saber que ya la perdía, un último abrazo, un último beso, un ultimo a dios.

! Y eso fue todo ! Lentamente se fue alejando, mientras yo con mis puños crispados,
quedé paralizado junto a la arena que tenía la forma de nuestra aventura, de nuestra
locura. Durante varias mañanas visité el lugar y por algo, que no puedo explicar, en la
arena está conservada nuestra silueta como testigo de nuestro amor.

Hoy, que pasaron varios años, tengo por costumbre, en verano, acercarme, hincarme
de rodillas y agradecer, al Señor, habernos permitido que nuestras huellas aún estén
donde están.
! Petrificadas hasta el fin de la creación !

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