domingo, 28 de julio de 2019

**Llámame**


**Llámame**



Estoy listo; llámame cuando quieras o cuando me necesites o quizás cuando me

extrañez. Llámame si el descanso no llega en tus noches o cuando el sol de la

mañana no alcanza a regalarte la sonrisa que da fuerza para comenzar la jornada.

Llámame para festejar contigo una alegría o si necesitas el apoyo por lágrimas

que asoman a tus ojos.

Si tu mente recuerda situaciones que hemos vivido; algunas que hemos juntos

disfrutado y otras que juntos mordíamos la pena que había en nuestros

corazones llenos de amor

¡Llámame!

Puedo ser tu hombro, tu cayado, tu confidente, tu consejero; no olvides que soy

el que mejor que te ha conocido y puedo guiarte por los caminos difíciles de la

vida y sus misterios.

Siempre estaré a tu lado, aunque no me veas, siempre mis brazos serán tu refugio, aunque no lo sepas, siempre mis ojos velaran tu vida cuidando cada paso para que puedas vivirla con seguridad y sin peligro.

¡Llámame!

A viva voz y a tu lado correré, con tus pensamientos y yo lo sabré o simplemente

con el latido de tu corazón que seguramente mi corazón lo escuchará y entenderá.

Ese es nuestro destino; no hay abismo, montañas o mares que nos pueda separar

después de haber vivo nuestra locura de amor. Bendita locura que gracias a ella

hoy puedo decirte:

¡Llámame!

Y al instante a tu lado estaré…

¡Llámame y lo comprobarás!

Mario Beer-Sheva


“¡Cásate! Si encuentras una buena esposa serás feliz; si no, serás filósofo.”

Sócrates.-




martes, 23 de julio de 2019

**Desorientado**


**Desorientado**



Vivo sin saber quién soy, vivo sin saber quién eres, vivo sin entenderte y eso

me mantiene hundido en el miedo y la desesperación. Quieres tu decirme

donde quedó tu sonrisa que me alegraba la mañana hasta el fin del día que

nuevamente, nos encontrábamos, y entre risas y comentarios esperábamos la

cena para irnos a descansar.

El miedo hace temblar mi corazón esperando alguna noticia que acabe con nuestro idilio; volviendo a los años de soledad que tan bien conocí.

Desorientado, despistado, perdido, confundido, ponle tú el sinónimo que quieras. Como navegar en un remolino de fuerte tormenta en una oscura noche frente a un mar desconocido.

¡Sí, así me siento yo!

Vivo pendiente de algo que no alcanzo a comprender, mi cuerpo tiembla ante

tu silencio, mis ojos lloran ante la seriedad de tu rostro, hago mil conjeturas

cuando rechazas mis caricias, mis besos, que en una época las festejabas como yo.

¿Qué te ha pasado querida mía; acaso he pecado sin saberlo sin quererlo y hoy me

 respondes como un castigo con tu falta de amor?

¡Si es un castigo dímelo cumpliré con la penitencia y volvamos al ayer!

Desorientado en un laberinto que no encuentra la salida mientras mi corazón a

gritos reclama el final del túnel la luz y la libertad.

¡Enséñame el camino correcto y volvamos a vivir!

¡No me condenes como un Pecado Original!

Mario Beer-Sheva


“Me até a tu vida. Y pude volar” José Narosky.-




miércoles, 10 de julio de 2019

**Cuento Contigo**


**Cuento Contigo**



¡Tú lo sabes, pero quiero recordártelo: cuento contigo!

Que los años nos sorprendan juntos, apoyados uno en otro, estamos dispuestos

a esperar la vejez.

Gozaremos de nuestras miradas que nos traerán los recuerdos de aquel amor

que nació con nuestra juventud y a través de los años creció, nos dio energía,

cobijo, reparo y la experiencia que nunca nos abandonó.

Fui tu bastón y aprendí a escucharte, fui tu sostén y me pagaste con alegría,

algunas veces lloré y me cubriste con el manto de tu piedad y en las horas de

alegría tu ponías la piel y agradecíamos a la vida la felicidad de nuestra unión.

¡Cuento contigo!

Tú eres testigo de la memoria de mi corazón, los pequeños y grandes momentos

de nuestra vida lo compartimos como si entre los dos tendríamos un solo corazón.

Y hoy, después de los años transcurridos, debo confesarte que cuento contigo en

terminar nuestras vidas unidos en la confianza y en el amor.

¡Cuento contigo!

Estoy seguro que en ti puedo confiar como en nadie puedo hacerlo; lo nuestro no

fue algo casual nos unió nuestros sentimientos, nuestros propósitos, nuestros sueños y al cumplirse todas estas metas y nuestros años a cuesta puedo decirte

sin la menor duda:

¡Cuento contigo!

Estoy seguro de ello y tú ya sabes:

¡Cuenta conmigo porque juntos somos más que dos!

Mario Beer-Sheva


“A mi padre le debo “vivir” pero a mi maestro le debo “vivir bien”.

Alejandro Magno.-