Anoche soñé y hace varias noches que se repite,un sueño que no
le encuentro explicación. Una voz suave, murmura en mi oído y
me invita a despertar, la escucho perfectamente:
¡ levántate, joven, levántate y deja de dormir ! Has regresado a tu
juventud, eres joven, nuevamente, aprovecha y sal a la vida a disfrutar de ella. Consíguete una muchacha y comienza a vivir.
Y si no es una muchacha, que sean dos, que sean tres o lo que
puedas conseguir.
Enamórate, baila y ríe, ama una o a todas, por igual. Besa sus labios, que besos piden y cánsalas
de besar. Besos húmedos o secos, es lo mismo, ya lo verás. Sumérgete en sus ojos y el amor que
hay en ellos, te asombrará. Te verás reflejado en ellos, como un espejo, que tu alma tendrá.
Escucha el ritmo de tu sangre, gracias a la juventud que vivirás y el ritmo, enloquecido, por
la avenida del amor marchará.
Recuerda, que el amor va y viene, es una calle de doble mano, la vejez, en cambio, tiene una sola
mano. Hoy tienes la oportunidad de volver a ser joven, inexperto, sin miedo al que dirán, sin
miedo al futuro, sin miedo a la longevidad. La vejez sabe sumar, pero no restar, aprovecha este
momento: ¡ Deja la cama, sale a la calle, enamórate, enamóralas ¡ Tus sueños se han cumplido
y como los sueños vienen y van:
¡ Sale al mundo y ponte a amar !
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