Quiero ser tu esclavo y por la mañana, quiero besar tus pies y darte las gracias por haberme permitido, compartir tu cama, velar tu sueño y auyentar las pesadillas, si fuera
necesario. Te agradesco tus noches de amor, cuando tu lo dispones, gracias por contarme tus tristezas y tener la
oportunidad, de participar, en tu alegrias.
El éxtasis, en nuestra relación, me hace hablarte al oído y el rumor de mis palabras, entibia tu corazón, gracias por esta emoción.
Quiero ser tu esclavo y agradecerte, que de tu boca, pronuncies tus deseos, que serán órdenes para mi y cumpliré, de inmediato, para que te sientas feliz.
Entonces, sí, seré un esclavo feliz. Tu serás mi ama, dueña de mi amor, de mi voluntad, de mis deseos. Mi pecho está listo a recibirte, como un sostén natural, te escucharé, en silencio, cuando sean amarguras y reiré, junto a ti, cuando deba hacerlo.
Quiero ser tu esclavo, es todo lo que pretendo, pasaré desapersibido, cuando no necesites de mi
seré una sombra en tu vida, una sombra nada más.
Beberé el llanto de tus ojos, con tal de verte feliz. Y cuando tu dolor se calme, saldrá el nuevo
sol, del nuevo día. Ser tu esclavo será mi alegría.
¡ Quiero ser tu esclavo para estar junto a ti !
¿ Acaso hay otra cosa, que pueda pedir ?
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