**Canción Para Una
Lluvia**
¡Escucha!
Y hazlo con atención ya
que se trata de nuestra canción. Sin letra, con música,
la hemos escuchado bailado
disfrutado y amarnos hasta su final.
En un abrazo o tomados de
las manos o simplemente con nuestros corazones,
al escuchar los compases,
se unían a la distancia gozando el momento del
recuerdo de nuestro amor.
¡Escucha!
La lluvia sobre nuestras
cabezas golpeando las chapas de nuestro humilde hotel que albergó, tantas veces,
nuestro apetito hacia el amor. Nuestro refugio
como una isla perdida en
el mar, nuestra casa que tanta veces soñamos y que
en un sueño quedó, nuestro
refugio de miradas hechas para la crítica ciega sin
conocer nuestro sacrificio
de esconder lo inevitable: habernos enamorado.
¿Cómo poder esquivarle al
amor como poder negar lo inevitable como poder
renunciar al cariño que
dos personas sienten entre sí como poder decir no cuando nuestros corazones al
unísono claman por la maravilla del amor?
¡Escucha!
Es nuestra canción
aprovechemos como una serenata la lluvia al caer y sin
pensar en nada bailemos
con su música que nadie podrá quitarnos el placer
que
nuestros cuerpos nos invitan a bailar. Que nadie diga que amar es vergonzoso
que solo la juventud tiene derecho a enamorarse. Que nadie lo diga porque no es
verdad. El amor es ciego mudo y sordo está presente en nuestra sangre camina
por nuestro cuerpo y domina nuestro cerebro y se mantiene vivo hasta su propia
decisión.
¡Escucha!
Podremos
callar pero nunca dejar de sentir mientras la vida nos acompaña como el aire
que nos da de vivir.
Mario Beer-Sheva
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