Hoy; en este momento hablaré, mi boca no callará, y todo lo
que
mi mente ordene todo lo diré, contaré secretos que ya no lo
son,
hablaré de intimidades de hace años o recientes, no aceptaré
más
el silencio de la educación, no tengo porque aceptarlo,
mostraré
toda mi vida,
triunfos o fracasos. Nada ocultaré.
Como una vitrina me exhibiré y dejaré que el mundo me juzgue,
me critique y hasta puede que me repudie nada de ello
torcerá mi
decisión de exponer mi vida de trabajo y sacrificio, que
hice por ti,
y recibir el pago de la traición y la maldad
Hablaré hasta donde llegue mi voz y que el viento sea el
mensajero
de mi confesión, nada me guardaré, mi verdad será el escudo
de mi
desnudez y dejaré libremente para que cada uno de su opinión
sobre
un amor descontrolado para una mujer que el odio y el rencor
puede
en su pecho habitar unidos por la maldad
Si; hablaré, nada dejaré al azar y rezaré para que se lea y
se comente y
así al divulgarlo cada uno podrá tener una opinión de la conducta
de
esa malvada mujer que en mi pecho se instaló.
Hablaré y juntaré fuerzas porque cuando me canse de hablar
tendré las
fuerzas necesarias:
¡Para dejarte de amar, mujer!
Mario Beer-Sheva
“No veo la miseria que hay sino la belleza que aún queda”
Ana Frank.-
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