Da vuelta la cara, no quiero que me mires, estoy llorando; llorando por ti y por mi, por los años perdidos, por los años que se fueron llevándose, lo que podría haber sido nuestra felicidad. En cambio fueron años de
angustia, de palabras que callaron, en lugar de hablar y pedirnos perdón. Construir una familia, con los que hoy
sería nuestros cimientos, con la firmeza del cemento y de
nuestro amor.
Guardamos silencio, no nos escuchamos, cada uno de nosotros tenía razón y así el tiempo fue transcurriendo y nosotros separándonos hasta que cada uno, en un nuevo camino, olvidó su corazón.
Te veo por la calle, como una mujer mayor, deslucida y abandonada, viviendo entre paredes de una pensión.
¡ Ya no eres la misma, tampoco yo lo soy !
¿ Donde quedó tu risa fácil, con mi carcajada se fueron las dos ?
Tu ropa, pasada de moda, mi traje, ajado y sin planchar. Los años se fueron y con ellos nuestra presencia; éramos, para los ojos una fiesta, tomados del brazo y con elegancia vernos pasar.
Da vuelta la cara, no quiero que nuestros ojos, se miren y nos vean, a los
dos llorar.
Ya todo ha pasado, remedio no hay, aún el recuerdo, que fresco en nosotros, está.
Sólo podemos esperar, que nuestros ojos se sequen y dejen de llorar...
Mario Beer-Sheva
" El vino es inocente, sólo el borracho es culpable"
Proverbio Ruso.-
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