**Tu Nombre Es Lluvia**
Con fuerza la lluvia caía;
la gente corría buscando el reparo del temporal
que amenazaba la fría
noche de invierno. La cortina de agua como un telón desgarrado no dejaba ver
con nitidez lo que en la calle ocurría salvo que la gente buscaba el abrigo.
Nosotros sentados en el
café discutíamos por algo sin importancia; solo los
enamorados sabemos
discutir por algo que no tiene relevancia y pone en
peligro nuestra relación.
De pronto te levantaste y apurada saliste del local
dejándome con mi voz
pidiéndote calma y cordura ante tu furia desatada.
¡Tú no lo entendiste!
Corriste hacia la lluvia y queriendo gritar tu nombre, que
no conocía, te vi perderte
en el gentío.
¡Cómo llamarte si nunca
supe tu nombre!
¿Será por eso que cuando
llueve, a pesar de los años transcurridos, la lluvia me
trae la pena de haberte
perdido y la herida de mi alma comienza a llorar?
Desde entonces cuando mi
mente recuerda te nombro como: “Lluvia” y siento
el palpitar de un amor
truncado que vive de los recuerdos que no debo olvidar.
¿Tu nombre es lluvia? ¡Tu
nombre es lluvia!
Que moja la tierra como a
mis mejillas y la llaga abierta para mejor recordar.
No he vuelto a verte; casi
no recuerdo tu rostro pero cuando llueve te perfilas
ante mis ojos como una
silueta borrosa que abre las puertas de mis recuerdos.
No te he vuelto a ver;
pero si muchas veces vi la lluvia caer y su humedad me hace preguntarme: ¿Cuál
será tu nombre?
¡El mío es esperanza, por
si te interesa saber!
Mario Beer-Sheva
“La gente no sabe qué
quiere hasta que se lo enseñan” Steve Jobs
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