¡ Hoy hablaré de ti !
Nunca te he visto, no conozco tu figura, el color de tus cabellos, el brillo de tus ojos, lo triste o alegre de tu sonrisa, la ternura de tu piel, tus labios, tal vez húmedos pidiendo otros labios, que te faltan para ser feliz. Desconozco tu edad, a que te dedicas y de que vives, donde vives, si hay un hombre que comparte tu vida, o un amante, tal vez.
¡ Hoy hablaré de ti !
Porque estoy enamorado de tu forma de escribir, escribes con el alma y eso me demuestra, que piensas con el corazón. Tu alma, valiente y audaz, está preparada, para que la lean cuando tu ya no estés, sin temor, enfrenta la vida y la sinceridad le hace hablar, de sus profundos sentimientos, que no siempre, se puede demostrar.
¡ Hoy hablaré de ti !
Y quiero decirte, que no quiero conocerte, conozco tu alma y me siento contento, leer lo que ella me cuenta. Tu alma es bella, triste y alegre, cambia como el día, cambia como el sol. Al leerte,
me doy cuenta, si tu alma sufre o ríe de pasión.
Algún día, nos cruzaremos por la calle, no nos miraremos, seremos extraños, pero no para nuestras almas, que se abrazaran con ternura y amor.
¡ Hoy al hablarte de ti !
Te recomiendo, escribe, no dejes de escribir, porque es el alimento de tu alma y sin la pluma y la
letra no tiene para que vivir.
¡ Es todo, lo que quería decirte hoy !
Mario Beer-Sheva
**Dedicado a Rosana Martí, amiga y colega**
Mario, mi apreciado colega y amigo, miles de gracias por tus palabras, me has emocionado. La vida es un pañuelo, quién sabe si algún día nos enlaza el destino. Pero nuestras almas como escritores que somos ya las tenemos unidas. Un fuerte abrazo.
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