Que no te asombre, esta carta es para ti, puedes hacer con ella lo que te plazca. Puedes guardarla o tirarla, comentarla o publicarla. Para mi es igual.
Por medio de estas líneas, las gracias te daré, te daré gracias por haberte conocido,
porque tu me abriste los ojos al amor, gracias por haber entrado en mi vida, como una exhalación y tu perfume me llevó a vivir, fantasías sin igual.
Gracias por haber traido, a mi vida, la luz que alumbró mi soledad, trayendo el sol de la esperanza, del nunca renunciar.
Gracias por haberme enseñado, a pensar, a decir y luego a escribir. Y mientras escribo, en mi mente, se amontonan los recuerdos que pujan por salir. Y en forma ordenada, le doy vida a esos pensamientos, que creía olvidados y estaban vivos dentro de mi.
Que no te asombre, esta carta es para ti y con ella pago la deuda, que tenía contigo, por todo lo que me diste y siempre en mi vivirá.
Como un huracán entraste en mi vida y como un huracán te fuiste de mi lado.
No pregunto porqué te fuiste, de mi vida, no pregunto porqué viniste, sin haberte llamado.
Que no te asombre, sólo una pregunta debo hacerte:
¡ Como haré para vivir sin ti !
Mario Beer-Sheva
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