Ya no tengo la fuerza misteriosa del amor que me dicte una
carta que
llegue a tu corazón; como tantas veces lo he hecho y hoy mi
ánimo
está de duelo o me falta la inspiración…
Tendrás que conformarte con las pobres palabras que nacen en
mi y
al escribirlas parecen una farsa de lo que hubo entre los
dos…
Ya nada quedó: ni tus besos, ni tus caricias, ni tus
promesas. Todo ha
muerto, ya lo sé, ni siquiera los poemas, hoy ridículos ayer
pura pasión…
Quisiera saber si mis sentimientos yacen muertos o están adormecidos,
esperando una señal que les ordenen a caminar, a pensar, a
recordar o
volver al presente disfrutando la vida que aún me queda…
¡ Que difícil de saber; son misterios de la vida que al
pasar deja huella
que no sabemos entender ¡
Sentimientos adormecidos o quizás heridos, o tal vez
muertos, o que
nunca han existido. Que han vivido en la imaginación, del
poeta que,
trasnochado o confundido, por su poética manera de sentir…
¡ Guarda tus sentimientos, viejo poeta, lo que tu has
sentido fue tu alma
enamorada del amor ¡
Mario Beer-Sheva
“Las tres cosas más importantes en la vida: el amor, los
amigos y los
secretos. Por eso hagamos el amor, quedemos como amigos y
guardemos
el secreto” Anónimo.-
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