Te buscaré sin descanso; no serás una quimera de mi mente de dolor, tu espera y lo verás. Te buscaré por los grandes mares y los enormes desiertos, por las altas montañas y los profundos valles; te buscaré en cada rostro de mujer que vea, en cada fragancia que me recuerde tu aroma, en cada voz que pronuncie mi nombre, en cada cuerpo que mis manos puedan acariciar...
¡Volveré y sabrás de mi!
Me verás con los brazos abiertos para recibir tu cuerpo lleno de amor y, nuevamente, estaremos juntos como estuvimos en la solitaria playa del mar, escondiéndonos de las miradas indiscretas por miedo del que dirán. Nuestros labios volverán a sellarse en un beso y sólo un suspiro nos hará escuchar las palabras, como plegarias, que anidan en nuestro interior...
¡Volveré y sabrás de mi!
No abrá nadie que pueda impedirlo; si sobrevivimos a la distancia, muchos años, sin apagarse el fuego de nuestros corazones, nos volveremos a juntar y formaremos una llamarada de nuestro amor, que nunca morirá...
¡Volveré y sabrás de mi!
Palabra de enamorado...
Mario Beer-Sheva
pensamientospoemas@gmail.com
"Es peligroso tener razón cuando el gobierno está equivocado" Voltaire.-
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